Oscar Wilde dramaturgo, poeta y escritor era reconocido por la pluma afilada, la critica social y el tono religioso que adquirieron varios de sus escritos.
'El fantasma de Canterville' es un cuento que retrata el escepticismo de los burgueses que sólo se interesan por la materialidad de las cosas dejando de lado aspectos más elevados de la existencia humana. Así es como la familia Otis oriunda de Estados Unidos se apropia del castillo Canterville y todas sus tradiciones al mismo tiempo que el fantasma que habita en el lugar intenta por todos los medios asustarlos.
Lo que más aprecio de Wilde en general es que logra generar cierta incomodidad en el lector al mismo tiempo que utiliza el humor ácido para ridiculizar determinadas actitudes o situaciones sociales, sobretodo de la era victoriana, periodo histórico en el que vivió el autor y del que también fue víctima. Supongo que si uno tira mucho de la soga, terminando ahorcándose con ella.
Incluso la biografía de Wilde genera eso mismo que refleja en sus letras, la ironía, la fuerte oposición y ¿por qué no? un poco de rebeldía, como querer desmantelar ciertos prejuicios de una sociedad bastante acartonada. Muchos de ustedes seguro habrán visto al menos una película ambientada en esos tiempos y los modales, el estatus, los títulos y las reverencias eran de suma importancia. Quizás a los millenials nos cueste identificarnos con toda esa pomposidad porque hoy priman los valores individualistas y cuanto más te alejas del rebaño, más te aplauden pero en otras épocas, no muy alejadas de la nuestra todo era muy distinto.
Wilde dejaba en evidencia lo absurdo de las tradiciones y del protocolo de la clase más alta al igual que la desigualdad social ya que en muchas de sus historias, sobretodo en cuentos como 'El príncipe feliz' la pobreza es lo que lleva al protagonista a desahercerse de sus propias joyas en pos de ayudar a los más necesitados. En 'El fantasma de Canterville' ademas de las diferencias entre estadounidenses e ingleses, también está la diferencia de clase en la servidumbre que intentan convencer a los nuevos dueños del castillo de que el fantasma es real. Podemos decir entonces que el fantasma representa de alguna manera la monarquía obsoleta junto a las tradiciones y el poder conservador casi extinto para dar pie al capitalismo conformado por la familia Otis quien están más interesados en poseer por el sólo hecho de poseer que por un valor histórico o cultural. De hecho Wilde ilustra en varios momentos la forma de combatir las manifestaciones del fantasma con repelentes, aceite, en fin productos de la revolución industrial que terminarían por acabar incluso con el propio fantasma. Y hay otro subtexto que incluye spoilers; el fantasma Sir Simon asesinó a su esposa y fue condenado por los hermanos de está a permanecer encerrado hasta morir de hambre. ¿Quién es la única que se apiada de su pena? La hija del matrimonio Otis, Virginia. Así es, Sir Simon asesinó a una mujer y es una mujer la que termina ayudándolo a redimirse, lo salva ella a él. Hya una probabilidad de que este analisís sea sólo mío pero bueno tengo que transmitirlo como lo demás.
Publicado por primera vez en 1887, está historia ha tenido muchas adaptaciones en diferentes medios como el cine, la historieta y el teatro. Mi favorita es de está última disciplina, en el año 2003 la dupla teatral argentina compuesta por Pepe Cibrian Campoy y Angel Mahler estrenaron en el teatro Del Globo el musical 'El fantasma de Canterville'. Es maravilloso ver el salto de la tinta a las tablas.
'El fantasma de Canterville' nos habla del choque entre lo viejo y lo nuevo, lo conservador y lo moderno, una historia que al igual que el fantasma de Sir Simon, no se oxida.