Una de las franquicias más populares de la última década cierra un capítulo.

Estamos hablando de El conjuro 4: los últimos ritos del director Michael Chaves y la firma de James Wan como productor. El matrimonio compuesto por Lorraine y Ed Warren vuelven a la carga,  a pesar de que él sufrió de un problema cardíaco y tuvo que alejarse de los casos paranormales que ambos investigan y resuelven. En esta ocasión, la hija Judy (quien fuera protagonista de Anabelle vuelve a casa) es también una parte fundamental de la trama. 

La historia empieza cuando los Warren entrevistan a la heredera de una tienda de antigüedades que les muestra un espejo y Lorraine embarazada, rompe bolsa tras tener una espantosa visión en él. Ya en el hospital, Judy nace muerta y Lorraine desesperada reza para que su hija reviva. El milagro ocurre frente a las miradas estupefactas del obstetra y las parteras. Años más tarde, el espejo llega a la vivienda de una familia de clase trabajadora en Pensilvania para convertir sus vidas en una pesadilla. 

Con está película tengo sentimientos encontrados porque el arco argumental de la familia aterrorizada realmente tiene escenas que me pusieron muy nerviosa, pero debo admitir que la resolución del caso fue el más flojo hasta el momento. Como opinión personal, podrían haber explotado más la historia detrás del espejo. En su lugar, la relación amorosa de Judy y su novio Tony, es quien ocupa el primer lugar y francamente no me terminó de convencer. Los actores no tienen la química de los protagonistas Vera Farmiga y Patrick Wilson (intérpretes de los Warren) así que no me generaron tanta simpatía y por el contrario, me pareció bastante cursi. Si bien el guión sazona lo romántico con el horror sobrenatural, por momentos se me hizo algo pesado. 

Todas las secuencias dentro del hogar en Pensilvania están muy bien logradas y los espectros que acechan a la familia son bien espeluznantes. La música a cargo del compositor Benjamin Wallfisch y toda la banda de sonido es impecable como las entregas anteriores. Vale la pena pagar la entrada para verla en las salas de cine. 

El final es una despedida nostálgica para quienes seguimos de cerca cada caso de los Warren desde su primera entrega en el año 2013. Si bien los verdaderos Warren de carne y hueso, ya no se encuentran en este mundo, sus fans van a poder seguir disfrutando de sus expedientes paranormales ya que HBO ya confirmó una serie con otros actores. 

En conclusión, si son fans de esta saga o buscan qué ver en octubre, mes del terror por excelencia, El conjuro 4: los últimos ritos puede ser una opción. 

Título original: The Conjuring 4 last rites. 

Dirección: Michael Chaves.

Elenco: Mia Tomlinson, Vera Farmiga, Patrick Wilson, Ben Hardy.

País: Estados Unidos.

Duración: 2 horas 15 minutos.

Cuando los investigadores paranormales Ed y Lorraine Warren se ven envueltos en otro aterrador caso relacionado con misteriosas criaturas, se ven obligados a resolverlo todo por última vez.