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Doctor sueño


Aclaremos que El resplandor es una de las obras magnas de Stephen King. Escrita con su propio sufrimiento en la lucha por liberarse de las garras de su adicción al alcohol, se ha convertido en una de las mejores novelas de terror.

La vara estaba muy alta para adentrarse en una continuación y King lo sabía. 

 

La historia nos muestra las secuelas psicológicas de Danny, ahora Dan Torrance, el dulce niño con el don del resplandor, quien se ha convertido en una copia fiel de su padre: alcohólico e iracundo, toca fondo en uno de los mejores capítulos de esta secuela. En paralelo, el autor nos presenta a Abra (nombre tan difícil para el español porque se presta a confusión) una niña con un resplandor potenciado quien desde la cuna conecta telepáticamente con Dan. La fuerza antagónica está concentrada en un grupo heterogéneo de psíquicos que han dejado atrás su humanidad para convertirse en lo que ellos llaman: Nudo verdadero. La niña Abra estará en su camino y querrán apoderarse de ella. 

 

Me ha costado mucho enganchar con la historia, sobre todo en las primeras doscientas páginas, nada más ni nada menos. El autor se tarda mucho en unir los hilos y los personajes y, sus vivencias, no son suficientes para mantener la atención. El nudo del libro atrapa, te mete de lleno en la acción pero cae rápidamente en una trama predecible, convirtiendo a su villana Rose The hat (la chistera en su versión al español) en un mal chiste. Lo mismo para sus compañeros, a quienes nunca terminamos de conocer bien con sus nombres de piratas y sus costumbres de gitanos. 

Es un libro con mucho, mucho relleno: capítulos enteros para explicar lo explicado. Personajes que en un diálogo se cuentan lo que el lector ya sabe, giros forzados, historias de terceros que no aportan nada, guiños a El resplandor que no tienen sentido más que para justificar la secuela, un final ñoño que no parece digno de King. De hecho, jamás pensaría que es una novela de Stephen King. ¿Qué pasó con sus críticas mordaces a la sociedad americana? ¿Qué pasó con su cinismo y su falta de fe en la humanidad? El terror, el suspenso, lo torcido, aquí son un juego de niños, es como una novela juvenil. 

La buena noticia es que la versión cinematográfica que tiene a Ewan Mcgregor como estrella, tiene mucho potencial para que por una vez digamos que la película es mejor que el libro.