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Delta de Venus


Delta de Venus fue publicado recién en 1977, es un compilado de relatos eróticos originalmente escritos por Anais Nin para un coleccionista millonario que ofrecía pagarle un dolar por página. 

"-Es bonito pero déjese de poesía y de descripciones no relacionadas con el sexo. Concéntrese en el sexo."

Le pedía el misterioso empleador así que la escritora no tuvo que otra que enfocarse en deleitar los cinco sentidos de manera sensual apelando a fantasías personales o ajenas, a anécdotas de sus amigos y conocidos, a inventos de su morbosa imaginación. El hombre parecía estar complacido,  no porque la halagara, sino porque pedía más. 

 

Delta de Venus está compuesta por quince relatos, algunos como "El aventurero húngaro" me generó rechazo ya que habitan en él violaciones y pedofilia por partes iguales.

Otros, como "Mathilde" me dejaron estupefacta pues la habilidad de la autora de comenzar su relato describiendo a una francesa y su búsqueda de placeres para dar un giro de ciento ochenta grados y terminarlo como un cuento de terror, hicieron que se convirtiera en uno de mis preferidos. 

La prosa de Anais Nin es exquisita, dotada de gran sensualidad con la dosis justa de sensibilidad para satisfacer los cinco sentidos del lector. Así es como en "Artistas y modelos", "Marianne" y "Pierre" se dedica a explorar el voyerismo; personas que obtienen satisfacción sexual observando a otros.

Con "Elena" saca su lado romántico cuando una mujer escritora alquila una habitación en una casa salida de un cuento de hadas sólo para enloquecer de pasión por uno de los inquilinos.

En "Manuel", seguimos a un exhibicionista con sus tretas sucias por las calles de Paris.

En "Linda" hay un baile de mascaras en donde las personas se sienten libres de follar como animales sin importar la corrección política.

En "Marcel" se desata una orgía y en "El anillo" se dejan ver un atisbo de sadomasoquismo.  Prostitutas, artistas y demás personajes bohemios del Paris de la década del 40 hacen gala desfilando en estas historias buscando saciar sus deseos. "El internado", "Mallorca", "Lilith" y "El vasco y Bijou" terminan de darle forma a este libro imperdible para los lectores que busquen una fuerte carga erótica. 

 

Uno de los puntos que años más tarde explicaría la propia Anais en sus diarios, es que cuando empieza a escribir estas historias se da cuenta que las referencias sobre la sexualidad son siempre las visiones de los hombres. Las mujeres no narraban sobre su sexo, sus cuerpos, sus deseos. La mujer en las fantasías del hombre eran objetos, adornos o esculturas inalcanzables a las que soñaban poseer pero ¿y las mujeres? Fue una revelación para ella misma poder explorar (se) a través de sus historias, meterse bajo la piel de sus personajes, indagar en sus propias fantasías condenadas al ostracismo por una sociedad patriarcal en la que las mujeres eran castigadas si deseaban placer. Así, estos relatos cobran más sentido, ya no son sólo historias pagas para satisfacer la mente febril de un hombre, sino la puerta a la sexualidad femenina que sin dudas, sentó precedente para que otras autoras pudieran contar lo suyo.

Un paso antes de la revolución sexual conjunta a la segunda ola feminista, Anais Nin es una escritora para conocer, releer y reivindicar. Delta de Venus es un libro para comenzar a descubrir su obra.