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La casa de las sombras


"¡Nunca hay que olvidar el encanto y el terror de la infancia! ¡Para algunos siempre será dolorosa!"


Catherine es una mujer de treinta y ocho años que tiene como tarea tasar una colección de muñecas antiguas en la mansión llamada Casa Roja. Allí se encuentra con la dueña Edith Mason, una anciana de mal carácter que le muestra y le cuenta la historia de su tío y su oscura tradición. Cuando sale de la casa, el ama de llaves Maude le deja una nota escrita: NO VUELVA MÁS. 

 

Del autor Adam Nevill he leído El fin de los días y El ritual, pero ninguna de ellas me ha generado la inquietud de La casa de las sombras. Tiene todo lo que una novela de terror necesita: el misterio truculento, un escenario apartado de la civilización, la atmósfera opresiva. 

La fuerza antagónica es fuerte porque cree que hace lo correcto. Esa ambigüedad ideológica y amoral la convierte en algo irresistible, difícil de vencer porque el límite nunca está claro. 

La protagonista está bien desarrollada, con sus intereses claros y un pasado sin resolver que conecta directamente con su presente. No me costó acompañarla en su viaje, sus motivaciones son reales, humanas, además tiene una habilidad mediúmnica que la hace especial y sus visiones son espeluznantes porque siempre están vinculadas a niños. 

Títeres, niños, taxidermia, casa aparentemente embrujada ¿qué puede salir mal? 

Adam Nevill se luce como titiritero con una historia siniestra que, estoy segura, los amantes del terror van a disfrutar. 

 

 

"La única defensa que existe es encontrar a otros. Mentes similares. Y un lugar donde nos sintamos a gusto."

 


Frases

"Varias veces a lo largo de sus treinta y ocho años de vida había llegado a creer que el mundo era un lugar insidioso."

 

"¿Qué sentido tendría el arte, señorita Howard, si nos dejara indiferentes?"

 

"Y las ratas tienen mucho en común con nosotros. Son una plaga. Unas alimañas. Van de un lado a otro febrilmente, decididas a sobrevivir en cualquier lugar y en las condiciones que sea."

 

 "Todo en aquel lugar era enfermizo, tóxico, estaba herido y era infeccioso. Era un lugar maligno."

 

"¡Nunca hay que olvidar el encanto y el terror de la infancia! ¡Para algunos siempre será dolorosa!"

 

 "Como la adversidad nos cambia a todos cuando somos sensibles e inocentes."